¡Atención, gente! ¡Se viene una nueva entrada de blog
a TuPTConline! Si hace pocas semanas os describíamos las funciones más representativas de GoDaddy, esta vez le toca el turno a HostGator,
una compañía con la que guarda muchas similitudes. Los dominios son claves para
la creación y alojamiento de una página web… ¿Nos acompañáis en esta travesía?
¿Qué es HostGator? Se trata de una compañía
estadounidense cuyo propósito es ofrecer al usuario un servicio de alojamiento
web. Se alojan en sus servidores nada más y nada menos que nueve millones de
páginas web, quedando así latente la gran importancia de esta empresa. Su
idioma principal es el inglés, pero el desembarco que hizo en México hace cuatro
años acarreó la creación de un blog en español para
tratar de resolver cualquier tema relacionado con la plataforma y sus
herramientas.
Tal y como solemos decir en estos casos, una
plataforma tiene éxito cuando ofrece un elenco de opciones o herramientas muy apetecibles
para cualquiera de nosotros. En este sentido, HostGator pone a nuestra
disposición un espacio en disco y ancho de banda ilimitados, el panel de
control “CPanel” como herramienta administrativa, una garantía de devolución
del dinero en cuarenta y cinco días y cuentas de correo o FTP sin
restricciones. Sin duda, son prestaciones que no suelen ser económicas,
¿verdad?
Nuestro pensamiento cambia bruscamente de dirección
al ver las tarifas de esta plataforma. ¿Por qué? Porque aquí viene el aspecto
ampliamente loable de HostGator. Ofrece tres paquetes:
“Hatchling Plan”, “Baby Plan” y “Business Plan”, todos con una cuota mensual
bastante apetecible (podéis consultar los precios en este enlace; estos
variarán según la promoción mensual que se haga). El primero de los mencionados
es el más básico, pero no por mucho, ya que las únicas particularidades que
ofrece son la imposibilidad de contar con más de un dominio y de certificados
SSL privados. El segundo paquete no cuenta con las limitaciones que acabamos de
mencionar, por lo que es apto para aquellas personas que necesiten alojar
varias páginas web en el mismo servidor. Finalmente, el tercero es el más
completo, pues también contempla opciones orientadas al comercio electrónico.
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HostGator dispone de un programa de afiliados que, como suele
ser habitual, funciona a través de un sistema de comisiones. Para ser afiliado
es necesario suscribirse en la página de registro: no necesitaremos contratar ningún servicio y no estaremos
supeditados a ningún baremo. Tras su aprobación (tarda unos tres días), nos
enviarán los datos para ingresar en el panel de afiliados, lugar en el que
podremos elegir los banners que más
nos gusten. A partir de ahí y tras un tiempo de ganancias, ¡a cobrar nuestro dinero
vía PayPal! Tardarán tres meses en ingresarnos las comisiones (por ejemplo, las
de febrero no las disfrutaremos hasta mayo).
El último punto que queremos tocar es el del servicio de atención al cliente. Si tuviéramos alguna incidencia, podemos
contactar vía chat (24 h) o por teléfono con los técnicos, que siempre
tratan al cliente de manera fabulosa y profesional. Debería ser así en
cualquier plataforma, pero el negocio actual vira a hacer nuevos clientes y a
no tener en merecida consideración a los fieles.
En definitiva, HostGator es una magnífica opción para
alojar nuestro proyecto web con la mayor fiabilidad posible. Respaldada por un
servicio técnico impecable y un programa de afiliados de bastante nivel, la
plataforma estadounidense ofrece unas prestaciones increíbles a precios
realmente ajustados. Estamos convencidos de que todos los puntos que hemos tocado
en este escrito son un argumento de peso para considerarla como una de las
mejores plataformas de hosting en la
actualidad.
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